En la Querencia

Hoy me bajé de la micro, y ya no me dolian los ojos, podia respirar mejor y el único sonido que escuchaba era el de los grillos, mis pasos y uno que otro pájaro gritando por el aire.
Tanto que me quejo de vivir en "el campo", pero hoy miré hacia el cielo y vi las estrellas y esos árboles gigantes, que creo que si subiera a la punta de uno de esos podría tal vez tocar una estrella.
Sumarle una hora a mis viajes a donde sea, vale la pena por llegar al lugar más tranquilo del mundo (del mundo conocido por mi), por ver a mis perros correr libremente con la lengua afuera, escuchar grillos en vez de autos y ver las estrellas por mi ventana, como si estuviera en el sur.

Es genial vivir en el campo.

Y es más genial vivir en el campo cuando estoy con ella, que me tranquiliza más.